domingo, 20 de diciembre de 2009

Los poemas del payaso de Pedro Varguillas premiado por la ULA

Por Fabián Coelho

Advertencia: lo que viene a continuación es excesivo, infame, quizá insoportable, quizá ofensivo (de distintas maneras, en distintos grados). Desaconsejo por completo su lectura. Desistan ahora. Es tiempo.

Como sabemos (y los que no saben entérense), anualmente la Universidad de Los Andes realiza un concurso en los géneros de cuento, ensayo y poesía abierto a la participación del estudiantado (pregrado y postgrado) auspiciado por la Dirección de Asuntos Estudiantiles (DAES). El concurso ya lleva unas veinte ediciones y se puede decir que, con sus altibajos, ha premiado a gente que merecía y que no merecía ser premiada, como en todo concurso (este comentario, ahora que lo pienso, no tiene sentido).

Este año nos es grato, o me fue grato, saber que Pedro Varguillas (Maracay, 1988), estudiante de la Escuela de Letras y conductor de nuestro desaparecido espacio radial LA EXPULSIÓN DEL PARAÍSO, ha ganado el Concurso DAES mención poesía con Los poemas del payaso. El poemario será publicado el año próximo por la Universidad de Los Andes en una edición colectiva que recopile los textos ganadores del 2009.

Hecho el preámbulo, les cuento:

El sábado, pasada la medianoche, tuve la oportunidad (la fortuna, más bien) de que Pedro Varguillas, poeta recién galardonado con el DAES de poesía, me escribiera vía g-chat saludándome. Él estaba invisible, yo disponible. Él galardonado, yo insomne. Como es notorio, se trataba de una fortuna para mí. Procedí inmediatamente a interrogarlo. Me habló (más bien me mandó el link) de una escuálida entrevista (la ponderación es mía) que le habían hecho en el Diario Los Andes, con preguntas tan... En fin. Está aquí: http://diariodelosandes.com/content/view/100558/105694/ si se quieren reír un rato. Las respuestas, por su lado, también dan para reír, pero para reír con y en raros casos para reírse de.

Retomo:

El sábado yo era un insomne afortunado que convencía a Pedro Varguillas, poeta recién galardonado con el DAES de poesía, de hacer una entrevista para este blog que está en un estado realmente deplorable de abandono, descuido, como la esposa obesa de un empresario exitoso con demasiadas mujeres disponibles y demasiada silicona al alcance de su mano y demasiado bótox para una felatio estupenda, como para dedicarle, si quiera, un recuerdo nostálgico en medio de un trago de whisky 18 años a la madre de sus hijos.

Vuelvo a retomar:

El sábado, insomne, convencía a Pedro Varguillas, poeta recién galardonado con el DAES de poesía, de que respondiera a una entrevista muy poco amable que le haría, una entrevista que, en todo caso, él entendía que no sería poco amable con él, sino con un montón de gente que para qué ponernos a mencionar. Así que la entrevista empezó. Usábamos, esta vez, el Messenger, debido a problemas (lentitud) de la conexión del poeta Varguillas por la vía g-chatiana que acostumbro, de un tiempo acá, a usar.

La entrevista ha sido retocada hasta el cansancio, hasta el punto de que hay cosas que he puesto en boca del poeta Varguillas que he dicho yo y viceversa. Cosas que nadie dijo en ese momento y ahora se agregan. Cosas suprimidas, por supuesto, como comentarios fuera de contexto (que sobraban y que fue lo que más trabajo dio a la hora de editar la entrevista) y la ortografía, claro, no podía faltar, fue revisada (y vaya trabajón, el poeta Varguillas, por ejemplo, está empeñado en que Gerbasi se escribe con “v”, supongo que por alguna reafirmación nacional leída entre líneas en Mi padre, el inmigrante). De modo que ya no estoy muy seguro de si todo lo que viene a continuación pertenece a la ficción porque, claro, ya sabemos, sí pertenece a esa otra realidad que es la virtual. De hecho, a veces tengo mis dudas de si era el poeta Varguillas el que estaba del otro lado y no algún imbécil o alguna imbécil burlándose de todo el asunto, impostando el estilo del poeta Varguillas que ya conocemos quienes lo conocemos (tiene varios blogs, revisen y verán de lo que les hablo). Así que, pues, con todo el riesgo de perder el tiempo leyendo una entrevista que quizá ni siquiera lo sea, que quizá nunca se dio, que quizá es un parapeto (otro más) de un par de expulsados del paraíso nostálgicos por los tiempos en que la literatura era un juego cotidiano que compartían cotidianamente y que ya, debido a distancias geográficas inmamables (la expresión se la debo a mi hermana y a una cola eterna en alguna arteria vial capitalina, siempre colapsada, siempre interminable, siempre inmamable), se ha vuelto esporádico, innecesario, impracticable, (y aquí les parecerá que está desfasada esta oración, pero claro, es por lo larga, revisen bien, quiten los paréntesis y se darán cuenta de que lo que viene a continuación está perfectamente coordinado con lo que aparece como diez líneas arriba, y disculpen, también, tanto paréntesis, en especial éste, que cuando se vuelven largos y en exceso explicativos tienden a complicar la lectura y a que uno abandone el texto (no sólo el que lo lee sino el que lo escribe), porque ya le ha perdido el hilo al discurso (que se ejecutaba en mí, como diría Cadenas), y, otra vez, nueva advertencia, ojo con lo que viene a continuación, no se me pierdan) los invito a ahorrarse la lectura de esta “entrevista” (las comillas, claro, son mías (o quizá de Pedro)) en caso de que estén esperando un texto medianamente serio, y que, si no se han dado cuenta en este punto, tampoco hallarán en lo que sigue, así que mejor evitarlo y ponerse a hacer otras cosas, porque quizá, también (vaya con estos expulsados), podamos estar diciendo algo que les incomode, algo donde alguno de ustedes se sienta aludido, ofendido. Si es el caso, sepa que era toda nuestra intención. Y si no, perdonen si en algo nos hemos equivocado. Así que ya saben, los que pasen de aquí (si alguno osare), o mejor dicho, si alguien ha llegado hasta aquí y aun así pretendiere continuar, reciba mi más complacido saludo. Es usted un absoluto desocupado. ¡Salud!

Así que vayamos a lo que nos ocupa:

La entrevista empieza…

Pedro Varguillas: Bueno, ¿cuándo le damos con la entrevista?

Fabián Coelho: Ya mismo.

PV: *oño, Fabián. Tengo sueño y estoy medio prendido.

FC: Pero así es que te quiero. Prendido. Te hago las preguntas. Las contestas. Luego las retocamos (sobrios), y luego de revisarlas las publicamos.

…y ni yo, entrevistador, me he percatado, pues, Pedro Varguillas, poeta recién galardonado con el DAES de poesía, sin esperar la primera pregunta dio la primera respuesta:

PV: Qué te puedo decir. Son veinte poemas. Catorce de esos los escribí en cuatro horas un día antes de cerrar el plazo de la recepción de los textos. Los otros seis los venía escribiendo porque tenía la idea de escribir sobre el payaso, que es el novio de mi ex (nota de FC: parece que ya no ex). Que esos catorce poemas los construí a partir de mis manuscritos de poemas que había obviado, o de versos que me gustaban y tenía la idea fija alrededor de ellos, y que con el payaso encontraron forma. Ese librito es un trabajo de revisión que tomó forma y unidad de libro.

(FC ha enviado un zumbido).

Estaba desesperado, Varguillas llevaba varios minutos de silencio y yo me estaba imaginando lo peor. Luego recibo un mensaje de texto al celular. No contesta, claro, porque se ha ido la luz.

Minutos después…

PV: Volví —dice la luz a través de Pedro.

FC: Continuemos. ¿Qué importancia tiene ese premio (si es que la tiene) para ti?

PV: La mayor importancia del DAES para mí es que siento que por fin puedo verme en igualdad con mis amigos, como tú por ejemplo, que ya se habían ganado el premio en ediciones anteriores... Este premio, como es sabido, es la ambición de todos los estudiantes en todos los niveles de la ULA. Entre sus antiguos ganadores hay gente como Simón Zambrano, Mariano Nava, Alirio Pérez Lo Presti, Gónzalo Fragui... Mira, gente dura, pues.

FC: En fin, que te importa este premiecito, ¿no?

PV: También tiene entre sus ganadores a una Emilia Miranda a una Vanessa Márquez, al siempre honorífico Eric Urriola, al gran Boris Angulo, y por supuesto al pequeño y carismático Gabriel Campero.

FC: Hombre... Deja la jaladera de *olas... Habla más del premio.

PV: El premio también consta de una dotación en metálico de mil bolívares fuertes, (un millón de los viejos), la publicación del libro y, desde este año, una beca hasta que me gradúe.

FC: ¡*oooooooño! ¡Beca!

PV: Fabián, yo siento que este premio es un gran incentivo para mi poesía y para mí como "poeta". Además, como te dije antes, es un premio que toda persona que quiera o tenga aspiraciones de escritor en la ULA debe ganarse o quiere, aunque sea, ganarse. Lo de la tajadita de la beca, cuando vengas nos vamos a que Ligia (tasca) un rato.

FC: ¿Cuántos libros aspiras comprarte con mil bolívares? (Digo, en la (librería) Nexos, porque ya sabemos que en La (librería) ballena blanca se te van en los cafés).

PV: Ahí te va la lista: Antología poética de Fondo de Cultura Económica de Montejo, la Obra entera de Cadenas por el FCE, Todos han muerto de Barroeta por Candaya. Y lo que sobre será para comprar un montón de libros editados por Monte Ávila, entre ellos el de Pérez Só, el de Calcaño y otros que tengo apartados en La (librería) del sur. El resto lo meto en un plazo fijo en un banco que no vaya a quebrar.

FC: En un banco de plaza...

PV: Ya va, dije que los de Montejo, Cadenas y Barroeta me los quiero comprar, eso no quiere decir que los encuentre en los anaqueles de las librerías y pa’ la Nexos es donde todos vamos (valga la cuña aunque no nos den descuentos).

FC: (Risas).

PV: O en el (banco) Venezuela…

FC: Deja de tirarle al pobre gobierno, que hace lo que puede...

PV: Chamo, dale tú y lo del gobierno... ¡Pilas que nos cierran el blog! Pasa la otra pregunta.

FC: Hombre, es que hay que reconocer, honor a quien honor merece, y este es un gobierno muy eficiente…

PV: Epa, una cuña. A Luis Alberto Crespo Monte Ávila le acaba de publicar su último libro "Se". El que no lo tenga que salga a buscarlo.

FC: … Fíjate la diligencia con que están destruyendo el país.

PV: Demasiado... ¿No te dije que se me acaba de ir la luz hace rato por tercera vez en el día? Bueno, mejor dicho, por primera, porque se fue a eso de las 12 (am).

FC: Hombre…

PV: Chamo, ya, la entrevista, *oño.

FC: Volvamos a lo que nos concierne. Veo que andas muy interesado en la poesía. Claro, escribes poesía, eres poeta…

PV: Y tú narrador que estaba empeñado en que yo era narrador. Y poeta no soy.

FC: No necesitas nada de la narrativa.

PV: Yo no me creo poeta.

FC: ¿Qué te crees?

PV: SUBRAYA ESO: NO ME CREO POETA, NO SOY POETA… Makario.

FC: *erga, esta entrevista, la censura más arr*cha que va a atravesar, va a ser la autocensura... ¡Viva Cháv*z, carah!

PV: (Risas) ¡En Sabaneta!

FC: ¿Te crees Makario? Hombre, no te pongas con mamagu*vadas. Escribes poesía, Ganas concursos de poesía…

PV: Sí, me creo Makario. Por ejemplo, cuando hablo conmigo mismo, por ejemplo en la cola del banco, me digo cosas como "cónchale, Makario, tú tal cosa... etc."

FC: Publicas libros de poesía, y yo sé que eso no es suficiente para ser poeta, yo lo sé Pedro, yo realmente lo sé, pero tienes un rasgo característico de todo buen poeta: te caes a curda en la (tasca) Cibeles y donde Ligia (tasca también). Y eso, amigo mío, es algo que no cualquiera hace en Mérida (risas).

PV: Me caía, Fabián, porque eso está muy caro y lleno de sifrinos. Chamo, además, un concurso lo gana cualquiera. Si no, pregúntale a Alessio Chinellato, reconocido lingüista, autor de la GPD (Gramática Poética Degenerativa), un método para escribir poesía infalible que fue publicado en el periódico Bello Púbico hará casi dos años.

FC: Oye, sí, lo recuerdo. Hombre, pero ya tienes beca y premio. Deberías proponerte retomar esas lides etílicas. Hay tanto buen poeta cayéndose a curda ahora mismo en la (tasca, ya lo dije) Cibeles (suspiro nostálgico).

PV: Ahora voy al Castillito de Eladio frente al Banesco del Centro, donde ponen vallenato y la negra está en 2,5 Bs F.

FC: ¡*oooooooooooooooooooooño!, El Castillito de Eladio es lo máximo. Ahí se llevan los buseteros a sus jevas. Mira, seriedad. Retomemos la entrevista que esto no es mamadera de gallo, esto es poesía, hombre. Poesía. No perdamos cierta compostura, cierto mínimo apego por la solemnidad. Mira, y hablando de poesía y de solemnidad, ¿tú no tienes un manifiesto, un grupo neo-post-neo-ultra-post-vanguardista?

PV: Esoos mismos, los buseteros y sus jevas. Recuerdas que el primer poema serio que escribí, digo serio y ni yo me lo creo, te lo mostré en la (tasca, *oño) Cibeles el día que íbamos a hacer el programa con la profesora Carmen Díaz. Y no lo hicimos porque los de la radio estaban haciendo campaña por el referéndum.

FC: Hombre, no difames, ese día no hubo programa porque había un *arajo que nos tenía mente (así mismo, mente) y el tipo se trajo a un grupito de músicos chavist*s y nos usurpó el horario... No era por campaña...

PV: ¿Pero ellos no tenían una canción que decía “sí” como treinta veces en los dos coros?

FC: No recuerdo. Volvamos a la entrevista.

PV: Chamo, para el festival mundial de poesía del año 2008, al cual fui invitado como parte del comité editorial de Bello Púbico, escribí un poema que decía "yo soy hijo de lo pos, pos, pos moderno/ mezcla de zombie, de alien y de injerto...

FC: ¡Oh!

PV: Yo actualmente no me considero un tipo nada vanguardista, más bien me siento prevanguardia, entre el barroco, las cuevas de Altamira, el palimpsesto del teórico francés este cuyo nombre ahorita no recuerdo (sabes que con los nombres soy terrible) y los simbolistas franceses, ligado con la poesía de Simón Díaz y Rafael Escalona y Vinicius de Moraes.

FC: Festival ch*vistoide (es decir, mal organizado, que en eso sí son muy eficientes (segunda vez que lo digo)) donde por cierto dieron un espectáculo para el olvido de dimes y diretes (que por fortuna los problemas de sonido hicieron casi imposible de entender para quienes no estaban cerca) entre ustedes, los bellopubianos y un grupo bastante gracioso (son unos humoristas) de buenos poetas forjados en los largos insomnios etílicos de la (no repito) Cibeles y la Viuda (que es la tasca de Ligia).

PV: Chamo, a la entrevista.

FC: Claro, te preguntaba qué clase de poeta te crees tú si no tienes manifiesto, ni grupo, sino una vaga publicación religiosa, Bello Púbico, plagada de textos para el olvido (algunos se salvan, hay que reconocer).

PV: Chamo, sin mucha habladera de paj* porque ustedes los antiguos galardonados del DAES hablan mucha pajit*.

FC: Es que no se me ocurren preguntas.

PV: Entonces yo te pregunto a ti.

FC: Solamente digo *ainas para picarte o picar a los improbables tres lectores de esta entrevista que sabemos quienes son. Mira, contesta.

PV: ¿Qué se siente hacer una entrevista un sábado en la madrugada de premio DAES a premio DAES, de narrativa a poesía?

FC: ¿Qué clase de poeta eres?

PV: Yo te dije que no soy poeta

FC: Se siente un gran extravío...

PV: ¿Por qué extravío?

FC: Hombre, ¿acaso no se nota?

PV: Chamo, yo me siento bien. Esta entrevista va a quedar del *arajo, ¿no?

FC: Estás prendido.

PV: ¿No, y tú?

FC: No era una pregunta. No tengo idea de cómo voy a editar esta *aina. Mira, volvamos a la entrevista.

PV: Eso es usted, chamo, que se va a la FILUC con una botella de ron Naiguatá (eso es con acento gocho, usted sabe).

FC: ¿En qué trabajas actualmente?

PV: En un poemario que ya me ha llevado casi un año, titulado"Sin título". Pero matando tigritos y como preparador de la cátedra de Literatura Española del Departamento de Literatura Hispanoamericana de la Facultad de Humanidades y Educación. ¿Y tú en qué estás trabajando?

FC: En la tesis. (E)Mira, si tuvieras que decir qué voces de qué poetas de que te has nutrido están, de un modo u otro, en tu poemario, ¿a quienes señalarías?

PV: En los poemas del payaso: La voz de Cadenas en el Amante y de Pérez Só en Tanmantra, en "Sin título" Luis Alberto Crespo se lleva casi todo el crédito. Pero hay mucha gente hablando por mí ahí.

FC: ¿A quiénes te refieres?

PV: Gerbasi, Emira Rodríguez, Enriqueta Arvelo Larriva, Cadenas, Lucila Velasquez, Ramón Querales, Nezahualcóyotl.

FC: ¿Y crees que has desarrollado ya tu voz propia o aún te sientes lleno de influjos, contagios, de otras voces mayores?

PV: Para eso falta mucho. Sin embargo, mientras más influencia de las voces mayores haya en mi poesía creo que estaré más satisfecho. Pero sí me siento cómodo con un estilo de poesía que quisiera escribir.

FC: ¿Cuál es ese estilo?

PV: En estos libros es bastante íntima y existencialista.

FC: ¿Y si te extravías, y si desapareces? ¿No le temes al mote de poetica crespiano?

PV: No creo extraviarme, ni desaparecer, menos con las sendas tan amplias que han creado nuestras grandes voces. NO le temo.

FC: A ver…

PV: Lanza preguntas que me estoy durmiendo y la compu se está recalentando…

FC: Has hablado de la grandes voces de la tradición venezolana, si tuvieras que nombrar una trinidad de la poesía venezolana, ¿quiénes la conformarían? Los tres poetas que para ti sean, de un modo simbólico, la poesía venezolana.

PV: Yo no hablé de grandes voces, el primero en utilizar el término aquí fuiste tú. Mi trinidad es esta: (Vicente) Gerbasi, (Luis Alberto) Crespo y (Luis Enrique) Belmonte. Aunque Belmonte no tenga nada que ver con Gerbasi o Crespo. O muy poco si es que tiene algo que ver.

FC: Pero Belmonte es muy reciente. Su obra está por completo inacabada. Dónde dejas a Ramos Sucre, por ejemplo.

PV: No me hagas hablar de obras inacabadas, que tú una vez dijiste que mientras no se publiquen más libros la obra está acabada. (Nota de FC: Yo no sé cuándo dije esto).

FC: Sí, pero Belmonte no tendrá ni 40 años.

PV: Te estoy siendo sincero, Fabián. Pero Belmonte me hace llorar; ¡cada vez que lo leo Ramos Sucre no! Sólo lloré o casi lloro con La tarea del testigo que es sobre Ramos Sucre.

FC: Entiendo (le digo, pero la verdad trato de entender). Te refieres a tu trinidad personal.

PV: Exacto. Ahora, si quieres preguntar por una trinidad nacional, pregúntale a Carlos Sandoval o a Víctor Bravo. Y pienso que si hablamos de poesía venezolana escrita por menores de 40 años Belmonte es El Padre, Villamediana El Hijo (aunque tiene más de cuarenta) y el espíritu santo aún no sé quién es… Agrega esto por favor

FC: Bueno, ya que hay tanta tensión con esto de los géneros, dame una trinidad femenina de la poesía venezolana.

PV: La mía: Enriqueta Arvelo Larriva, Miyó Vestrini, La Gran Desconocida Emira Rodríguez, tú sabes: "hoy estoy triste de estar lejos y miro en el espejo buscándote”.

FC: A ver. Ya finalizando. Me has comentado, fuera de la entrevista, que el Bello púbico se está preparando para su relanzamiento.

PV: Sí, vamos a relanzarlo

FC: ¿Qué podemos esperar de los bellopubianos en esta nueva etapa de la revista? Recordemos que una de la cosas criticadas hasta el hartazgo era la cuestionable calidad de los textos y una de las siempre aplaudidas, el carácter innovador, lúdico, del diseño.

PV: Pensamos encargarnos, el grupo editorial, sólo del diseño y de la editorial, y el contenido del periódico pensamos hacerlo con colaboraciones de jóvenes escritores venezolanos. Creo que el Bello entra en una etapa un poco más madura donde intentaremos irnos un poco al análisis pero intentando alejarnos todo lo posible de ese aire tan pesado de la academia. Vamos a hacer una campaña vía e-mail, tenemos una lista muy, muy larga de emails invitando al blog del Bello donde subiremos el periódico y están colgados los otros, http://www.bellopubicox.blogspot.com/, e-mail: bellopubicox@gmail.com y bellopubicox@hotmail.com.

FC: ¿Seguirá siendo de una sola hoja?

PV: Sí, una sola página

FC: Y si piensan abordar el análisis, ¿cómo lo resolverán con tan poco espacio?

PV: Con unas editoriales duras, que vayan de la mano con el diseño.

FC: Y tendrán un filtro editorial más riguroso, espero.

PV: Como te dije, Fabián, vamos a trabajar con colaboradores, pero la intención es buscar a la mejor gente que esté escribiendo y sean chamos, en toda Venezuela. En eso el facebook nos facilita el trabajo.

FC: En fin, el Bello vuelve.

PV: Sí, el Bello vuelve más bonito. Chamo, esta entrevista está muy larga.

FC: Ya para cerrar, ¿qué significa la ciudad de Mérida en tu poesía?

PV: La gran herida

FC: ¿Qué esperanzas albergas sobre el futuro de la literatura en Venezuela?

PV: Chamo, ¿por qué tú siempre tienes que hacer esa pregunta? Siempre que la haces me acuerdo de aquel escritor caraqueño que en una Bienal Picón Salas no pudo nombrar diez cuentistas venezolanos.

FC: Fleján.

PV: Yo no quería decir nombre, mira que ese tipo tiene contactos.

FC: (Risas). Él sabe la pena que pasó.

PV: De repente y venía de la cabaña de los panas de Plátano verde y por eso no supo responder…

FC: Mira, no nos bifurquemos.

PV: Pues de la literatura venezolana espero lo mejor, con gente como tú y los salmones uno puede esperar cosas muy buenas.

FC: No, en serio.

PV: Fabián, no he dudado ni un sólo momento desde que entré a la Escuela de Letras en el porvenir de la literatura venezolana.

FC: ¿Qué sueño tienes como poeta?

PV: La paz mundial.

FC: (Risas). ¡Esa fue la mejor! ¡Vas a ser el primer poeta de la historia en recibir el Nobel de la paz!

PV: Y además de la paz mundial y de que Majo vuelva conmigo, que algún día los chamos o la gente en general (eso a propósito de los periodistas o redactores de Pico Bolívar) se dediquen mis poemas, y se enamoren o se ayuden en el despecho o en la vida misma al mejor estilo de Coelho, tu familiar lejano.

FC: Bello. Bello como los vellos púbicos. Mira.

PV: Háblame.

FC: Continúo. Estamos finalizando.

PV: ¿Más? Chamo, muévelo.

FC: ¿Crees en la literatura?

PV: Totalmente. "La literatura es mi vida", dice un cartelito en la entrada de mi apartamento.

(PV te ha enviado un zumbido).

FC: ¿La literatura salva?

PV: Salva y sana como cuando la gente tocaba manto sagrado, antes de que pare de sufrir quebrara.

FC: ¡Hermano, gracias por su tiempo!

PV: De nada. Me voy a dormir. Cuando tengas la entrevista lista me la pasas.

FC: Sí va. No sé cómo *oño voy a convertir esto en algo coherente. Pero bueh...

PV: No debe ser coherente. Pilas con lo que haces. Primero me lo pasas a mí.

FC: Seguro.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Asociación de Escritores de Mérida abre concursos de cuento y poesía

BASES DEL V CONCURSO DE POESÍA “Simón Darío Ramírez” y V CONCURSO DE NARRATIVA “Antonio Márquez Salas” 2009.

ASOCIACIÓN DE ESCRITORES DE MÉRIDA

  1. Estos concursos tiene como objeto estimular el trabajo creador de los escritores del Estado Mérida. PODRÁN PARTICIPAR escritores y escritoras nacidos o residenciados en Mérida. Igualmente los miembros activos de esta Asociación residenciados fuera de Mérida y de Venezuela. Quedan excluidos los escritores ganadores de Concursos anteriores en el género en el cual concursaron.
  1. PARA POESÍA ENVIAR cuatro (4) ejemplares de un libro absolutamente INÉDITO, mínimo 70 páginas, máximo 100 páginas o cuartillas. Para NARRATIVA ENVIAR mínimo 100 páginas máximo 200 páginas o cuartillas, tipo carta, por una sola cara, a doble espacio en Time New Roman, 12 puntos, en cuatro (4) sobres de manila con SEUDÓNIMO, haciendo mención del título del libro y del género al que va dirigido (poesía o narrativa).

  1. En SOBRE aparte, con la PALABRA PLICA, engrapado a uno de los sobres anteriores, enviar la información curricular del o la concursante, con su nombre propio, número de cédula, teléfonos, dirección postal y electrónica. El sobre debe llevar el título del libro, tipo de concurso y el seudónimo. INCLUIR un CD con la obra concursante.

  1. EL LUGAR DE RECEPCIÓN es la “Antigua Casa de los Gobernadores”, ubicada en la Av. 3, entre calles 19 y 20. Oficina de la Sra. Geraldine Brenda Saldate.

  1. SE DECLARARÁ SOLAMENTE UN PRIMER PREMIO en cada uno de los géneros. La premiación consistirá en un Diploma y la publicación de la obra ganadora. En caso de que los jurados lo consideren, se otorgarían hasta dos DIPLOMAS DE MENCIÓN HONORÍFICA, siendo estos libros posibles de ser considerados para futuros proyectos de publicaciones de la AEM.

  1. LA FECHA DE CONVOCATORIA comienza a partir de la publicación de las presentes bases y concluye el 15 de NOVIEMBRE de 2009.

  1. Lo no previsto en estas bases será resuelto por la Junta Directiva de esta Asociación.

  1. INFORMACIÓN ADICIONAL: Telfs. 0414 7466503 / 2830031 (Mireya Kríspin), o dirigirse a la dirección electrónica info_escritoresmerida@yahoo.es

jueves, 2 de julio de 2009

VIII Bienal de literatura “Mariano Picón Salas” del miércoles 8 de julio al sábado 11 de julio de 2009.

La próxima semana Mérida recibirá a las firmas más reconocidas de nuestro panórama literario para celebrar la VIII Bienal de Literatura “Mariano Picón Salas” organizada por la fundación Casa de las letras “Mariano Picón Salas”, el tema en cuestión de la presente bienal será “la incidencia del lugar desde el que el escritor produce su obra en el imaginario de la globalización”. En esta ocasión le será otorgado el Doctorado Honoris causa en Letras al escritor español Enrique Vila-Matas.

martes, 9 de junio de 2009

El Salmón presenta en Mérida este 12 de junio VULGAR, su quinto número

Significantes de lo prohibido, las groserías son constantes en la efímera instancia de lo oral, el perecedero instante del grito. Sin embargo, pueden devenir incómodas cuando alcanzan una altura estética a través de la estrategia —perdurable— de lo escrito, ya sea para develar una pasión escatológica, o para balancear al poema entre la pulsión tanática y la genitalidad de un discurso erótico. Este nuevo número de El Salmón - Revista de Poesía se propone la legitimación de la grosería, el erotismo explícito, el improperio y las dinámicas de la vulgaridad como sustancia poética presente en la literatura nacional. No es sólo una audacia, sino la ocasión de presentar un corpus poético que la crítica institucionalizada ha excluido casi completamente de su lecturas.
En esta nueva entrega Luis Miguel Isava realiza una lectura del poemario Erotia (1986) de Alejandro Salas; Daniela Jaimes-Borges reflexiona sobre los incendiarios Poemas antimayéuticos (1977) de Néstor Caballero y Arnaldo E. Valero escribe acerca de la poesía del tabernero merideño Pedro María Patrizi. El dossier poético está conformado por textos de Pedro María Patrizi, Néstor Caballero, Jesús Enrique Guédez, Antonio Urdaneta, Carlos Borges, Iñaki de Errandonea, Josefóscar Ochoa, Caupolicán Ovalles, Vicente Lecuna y Alejandro Salas. En las sección de poesía inédita presentamos una selección del poemario Velada de Varonas de Néstor Caballero, y en esta ocasión "El alevín" es Enio Escauriza, con una selección de textos poegráficos. Inaguramos, además, la sección "Zonas abisales", en la que se abordarán temas y casos particulares poco estudiados de nuestra poesía. Como primer caso presentamos la vida y obra del extraordinario personaje Josefóscar Ochoa. Cierran la edición tres breves notas sobre poemarios de Manuel Rodríguez-Cárdenas, María Calcaño y Ludovico Silva.
Queremos aprovechar este mensaje para comunicar
el ingreso de Raquel Abend van Dalen al equipo editorial de nuestra revista.
Próximo número: "Desvarío".

Lugares y fechas de próximas presentaciones:


Mérida

Viernes 12 de junio de 2009
7.00 pm
Feria Internacional del Libro Universitario de Mérida (Filu)
Centro de Convenciones Mucumbarila
Espacio "Blas Coll"

Caracas
Martes 16 de junio de 2009
7.00 pm
Escuela de Letras UCV
Aula 201

Coro
Jueves 16 de julio de 2009
3.00 pm
Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (Unefm)
Auditorio del Núcleo Docente "Los Perozo"


Fuente: El Salmón - Revista de poesía.
Extraído: http://revistadepoesiaelsalmon.blogspot.com/

lunes, 25 de mayo de 2009

Carmen Amaralis Vega de visita en Mérida

La Asociación de Escritores de Mérida, El Instituto Municipal de Cultura de la Alcaldía Libertador y la Asociación Civil Castalia, invitan al público en general, a la programación que se desarrollará con motivo de la visita a Mérida de la Científica y Escritora de Puerto Rico, Carmen Amaralis Vega Olivencia. El día jueves 28 a las 6:30 p.m. en la Biblioteca Bolivariana habrá una tertulia que se titula: “Entre la Ciencia y la Literatura”, en la que la Dra. Vega hablará de sus experiencias Científicas como Catedrática de la Universidad de Puerto Rico, en Mayagüez, y nos hará disfrutar de sus textos, tanto de Poesía como de Narrativa, y el viernes 29, a las 9p.m. en la Milonguita, ubicada en el Centro Comercial Plaza Mayor, nivel Plaza, el programa se titula: “Narrativa de Humor”, en el que participará la Dra. Carmen Amaralis Vega Olivencia, el Licenciado Arturo Mora Morales, Presidente de la Asociación de Escritores de Mérida, y las escritoras María Luisa Lázzaro y Mireya Kríspin. Si quieres compartir un momento de risas, con el buen humor de los escritores, te esperamos en La Milonguita.

La Dra. Carmen Amaralis Vega Olivencia, nació en Mayagüez, Puerto Rico, es Doctora en Química-Física (Universidad de Florida.) Obtuvo una Maestría en Química Nuclear en la Universidad de Puerto Rico, Recinto Universitario de Mayagüez. En la actualidad se desempeña como Catedrática de Química, en el RUM, allí dirige varias tesis de Maestría en Termodinámica y en Estudios Electroquímicos de drogas anticáncer. Es Miembro de la Asociación de Escritores de Mérida. Su obra literaria ha sido publicada toda en Mérida por el Fondo Editorial “La Escarcha Azul”, Actualmente ya tiene una extensa obra publicada. Si quieres pasar un momento divertido y grato, te esperamos, en estos dos eventos.


Fuente: AEM

jueves, 16 de abril de 2009

Scott García, Leonardo Rodríguez y María Dayana Fraile ganadores del Premio de Cuento de la Policlínica Metropolitana

16/04/09: El jurado conformado por Ednodio Quintero, Krina Ber y Alberto Barrera Tyzska, otorgaron el primer premio a Scott García, con un cuento titulado El profanador del Señor. Guaracha para un gallo muerto y Mi vida con Fiori, de Leonardo Rodríguez y María Dayana Fraile, respectivamente, fueron los otros dos ganadores. También otorgaron 5 menciones especiales.

Con El profanador del Señor, una ficción ambientada en el año 30 dC, el zuliano Scott García se adjudicó el primer lugar del Premio de Cuento Policlínica Metropolitana para Jóvenes Autores, según decisión de Ednodio Quintero, Krina Ber y Alberto Barrera Tyzska, miembros del jurado de dicho certamen, el cual que se reunió ayer, 15 de abril, para decidir el veredicto. El jurado señala que El profanador del Señor, presentado a concurso bajo el seudónimo de Caribe Santamaría, es "un texto original y brillante, que se impone con mucha fuerza, proponiendo una versión apócrifa de la vida de Jesús de Nazareth, que busca acentuar su naturaleza humana". García ya había obtenido mencion de honor en la edición anterior de este certamen.
El segundo lugar del concurso, recayó sobre sobre el cuento Guaracha para un gallo muerto, firmado bajo el seudónimo de Alfeo Orfila, por "la belleza narrativa de ese inquietante monólogo de una mujer que se dice tres: la vieja, la niña y la loca, con una voz fresca y contemporánea, así como un gran acierto poético". Abierta la plica, el autor resultó ser Leonardo Rodríguez.
Por último, el tercer premio de este certamen, recayó sobre el texto Mi vida con Fiori, enviado a concurso bajo el seudónimo de Teresa de los Símbolos, por "su manejo narrativo de las claves del extravío generacional, encarnado en el personaje de una muchacha en su desesperado forcejeo con las reglas que rigen su mundo". Teresa de los Símbolos resultó ser María Dayana Fraile.

De igual manera, el jurado decidió otorgar menciones de honor a los siguientes cuentos:
Lima-limón, de Williams Oswaldo Vivas
Lucila y el resto de las cosas, de Enza García Arreaza
Pigmalión, de Manuel Llorens
Cíclope, de Javier Eduardo Domínguez Torres
Dí que quema, de Eduardo Febres Muñoz

El ganador de este certamen obtendrá un premio en metálico de BsF. 6.000, mientras que los dos premios restantes serán de BsF. 3.000 y BsF. 1.500, respectivamente. De igual manera, tanto ganadores como menciones de honor, formarán parte de la publicación del concurso para ese año.
El acto de premiación tendrá lugar durante el mes de mayo de este año, en fecha que la organización revelará con anticipación. / FBV

Fuente: Ficción Breve Venezolana.
Extraído: http://www.ficcionbreve.org/site/contenido.php?id=1528

miércoles, 25 de marzo de 2009

Homenajearán a Ramos Sucre en Jornadas Estudiantiles de Creación Literaria

Este año, en el marco de las IV Jornadas Estudiantiles de Creación Literaria, le rendirán un merecido homenaje al poeta cumanés, tan apreciado por nuestra academia, José Antonio Ramos Sucre, en virtud de la celebración de los 80 años de la publicación del poemario Las formas del fuego (1929).
El evento, que se celebrará entre los días 18 y 20 de mayo de este año en la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad de Los Andes - Mérida, contará con la presencia de destacadas figuras de la literatura venezolana y, como siempre, con las infaltables mesas destinadas a narrativa y poesía para la lectura de los estudiantes.
El plazo de recepción de obras está pautado entre los días 16 de marzo y 17 de abril. Las inscripciones se iniciarán el 27 de abril y acabarán el 8 de mayo.
Y, como siempre, todos están invitados a asistir.
Para más información, visiten el blog de las jornadas: http://www.jornadadecreacion.blogspot.com/

Los expulsados

martes, 24 de marzo de 2009

Recital poético se celebrará en la Librería Ifigenia

Un grupo de voces jóvenes y emergentes de la poesía merideña, conformado por los nombres de Víctor Ortega, Analí García, José Gregorio González González y Luis Manuel Pimentel, estarán este viernes 27 de marzo de 2009 ofreciendo un recital poético al que todos estamos invitados.
Recordemos los lúcidos apuntes de Cadenas cuando decía:

"Frente a mucha poesía moderna sentimos ganas de decirle al autor: Muy bien. Sabes lo que debes evitar. No cometes tonterías.
Pero ¿eso es todo?
Además, a veces nos gustan las tonterías".

Acompañémoslos este viernes a partir de las 7:30 pm
en la Librería Ifigenia (Av. 3 Independencia, frente a la Plaza Bolívar).

jueves, 19 de marzo de 2009

Pedro Rangel Mora en LA EXPULSIÓN DEL PARAÍSO

El pasado 26 de noviembre de 2008, el escritor merideño Pedro Rangel Mora nos acompañó en el programa radial de LA EXPULSIÓN DEL PARAÍSO para hablar sobre su último libro, Muerte en la víspera, que fuera publicado por el Grupo Editorial Random House Mondadori ese mismo año.

El libro, del que ya hemos hablado antes en este blog, se compone de seis his
torias autónomas que despliegan, a lo largo 165 páginas, temas de nuestro tiempo: crímenes impunes, mafias que dominan a su antojo el sistema policial, supersticiones de talla histórica, reality shows, física cuántica, y crímenes que crean todo un tejido internacional entre España y Venezuela con trata de blancas, sicariato y mutilaciones. La violencia siempre erigiéndose, propagándose como un cáncer, cubriendo con su sombra cada una de estas historias, mostrando sus distintas facetas, siempre crueles, siempre terribles.

El libro está escrito en un lenguaje directo, ágil, de una gran economía retórica, y las historias que lo constituyen son rápidas, amenas, divertidas, con una insoslayable crítica social y con un mordaz sentido del humor siempre apadrinado por una ironía a prueba de balas.

Muert
e en la víspera es un libro de nuestro tiempo en el que palpita un mensaje desolador: la voracidad de la violencia y la corrupción de nuestra policía cada vez reducen más el ciego reino de la justicia.

Fabián Coelho: El relato policial se inicia en el siglo XIX con Edgar Allan Poe, teórico y autor de varios cuentos que se insertan dentro de este género, con un esquema que es hoy día el esquema clásico, una suerte de ecuación perfecta donde hay un criminal, una víctima, un crimen, un detective, y un final donde siempre coinciden la resolución del caso y el restablecimiento del orden.

Pedro Varguilla
s: Entonces, podríamos preguntarle a Pedro Rangel Mora: ¿cómo se definiría la novela policial?

Pedro Rangel Mora: Bueno, los elementos los nombraron ustedes en este momento. Yo le agregaría como elemento la pesquisa, y bueno, el desenlace, que lo dijeron ustedes de otra manera. Pero sí, el crimen, el investigador, la pesquisa, el desenlace, son como los elementos básicos, clásicos, de la novela policial. Desde luego, a través del tiempo ha sido transformado y cambiado y se ha jugado con estos elementos.

FC:
Es la puesta en escena, además, de la racionalidad y de su triunfo dentro del relato para restablecer e
l orden perdido a causa del crimen. Es muy optimista el relato policial clásico, y eso se trastoca en el siglo XX y es allí, dentro de esa corriente, donde usted se enmarca, donde ya todos estos elementos vienen a desordenarse para crear un efecto estético distinto.

PRM:
Sí. Creo que es muy importante en la literatura jugar con los límites, trascender esos límites. Si uno se mantiene dentro de lo ya hecho llega a la redundancia, a la repetición. En ese sentido, trastocando esos elementos básicos, uno puede construir un relato completamente separado de lo que ha sido la novela policial clásica. Podría
decir que, como decía el crítico Julio Miranda sobre mi novela, El orden de los factores, que es una novela policial, que ésta es más y menos que una novela policial, en el sentido de que están los elementos pero hay otros que se suman, se cuentan otras cosas, vidas. Yo trato siempre de trascender esos elementos porque no me siento cómodo escribiendo en forma convencional. El juego tiene que ampliarse, el juego tiene que ser otro.

PV: Entonces hablaríamos de una ampliación en cuanto al género, de una modificación en la estructura. Por ejemplo, no siempre mostrar quién es bueno y quién es malo, sino mostrar más bien la realidad, ir hacia lo real.

PRM:
Claro. La novela es siempre un reflejo de la realidad del país donde se circunscribe el relato. Normalmente una constante de la novela policial es que es un reflejo de la realidad policial del país. Si hay un sistema policial eficiente, grande, si hay un sistema persecutorio existente, hay una gran novela policial
, en número y calidad. Es el caso de EE.UU., el caso de Francia, el caso de España, donde los sistemas policiales son muy desarrollados. Por eso, de alguna manera, la novela policial en Venezuela es incipiente. No hay una gran novelística policial en cuanto a número y autores. No hay un gran número de autores trabajando la novela policial. Y eso tiene que ver un poco, también, con que nuestra policía no juega los roles que juega en otros países, como Cuba, por ejemplo. Cuando me refiero a cambiar un poco la estructura de la novela digo que, en el caso de Muerte en la víspera, la novela recientemente publicada, son básicamente seis relatos, escritos por seis autores omniscientes, distintos. Relatos que están concatenados por los mismos personajes y por la misma ciudad, porque todo eso sucede en Mérida. Los personajes están de alguna manera relacionados con Mérida, profesores universitarios, policías de Mérida, el Mercado, es decir, una serie de elementos que tienen que ver con Mérida, pero en vez de ser contados por un solo autor en tercera persona, por el autor-dios, son seis autores distintos, son seis personas que cuentan relatos distintos, que están unidos por una misma trama. Entonces de esa manera rompe la estructura básica del relato policial.

FC: Que se arma como una suerte de mosaico, un mosaico de lo que sería el sistema policial y judicial de nuestro país, y de la ciudad.

PRM: Claro, sería una imagen. Y un elemento muy importante es que en la novela clásica se resuelve el crimen, se vuelve al orden, como tú decías hace un momento. En esta novela, en Muerte en la víspera, resulta que, como ocurre en nuestra realidad, muchos de los crímenes no se resuelven porque realmente en la práctica muchos no se resuelven. Entonces se resuelven en las noticias de prensa, en el chisme, pero no en la verdad verdadera de los procedimientos de los tribunales.

PV: Entonces ahí es cuando uno podría decir que la novela actual, la que se está haciendo, a mi parecer debería tener un punto, un eje de partida, el buen uso de la ironía. Mediante el buen uso de una ironía se podría lograr un discurso lo suficientemente válido como para poder mostrar una realidad en la cual se vive. Por ejemplo, un crimen que se comete, y cómo hacer de ese crimen que se comete mediante un relato, un discurso irónico, cómo volver a esa realidad trascendental que nos trastoca, cómo volverlo un discurso que nos causa risa, que nos causa placer, un discurso que lo vemos, podemos hasta alejarnos de esa realidad en la cual vivimos para poder disfrutarla, que es algo muy interesante en Muerte en la víspera , que habla de una Mérida que podríamos catalogar de universal, tanto puede ocurrir lo que ocurre en Mérida, como podría ocurrir en cualquier ciudad de latinoamérica.

PRM:
Sí, sí. Yo trato de usar elementos de Mérida: la universidad, los estudiantes, los profesores, sucesos de Mérida, sucesos que ficciono. Pero sí, como tú dices, creo que el humor es un elemento muy importante. Es otra forma de decir las cosas. El humor forma parte esencial de nuestra cotidianidad, de nuestra naturaleza como venezolanos. Siempre está el juego y el humor. Yo lo uso como un elemento más, importante. Porque la novela policial siempre es como un reflejo, un reflejo difuso de la realidad.


FC:
Bien, y siguiendo un poco con el comentario de Pedro [Varguillas], este es un libro que a pesar de que se desarrolla dentro de la ciudad de Mérida no es una novela que está llena de ese color local como nos lo enseñaron en el liceo. No es una Mérida plagada de personajes tipos y de violines andinos, es más bien la representación de una realidad totalme
nte descarnada, y una realidad además universal, donde los ordenes imperantes deciden qué es la justicia, como en el caso de la mafia china, que ocurre en la novela, y cómo va comprando ciertas prebendas para moverse a su gusto. Entonces, en ese caso, la novela muestra una Mérida que no tiene por qué ser Mérida, lo cual rompería un poco con aquello de "Caracas es Caracas y lo demás es monte y culebra". No, Mérida es también un ciudad donde pasan cosas que podrían ocurrir en cualquier parte. ¿Coincide usted con eso, es parte de su intención?

PRM:
El t
raslado lineal de la realidad que vivimos en este momento en Venezuela puede resultar, no sólo para el escritor, sino para el lector, en vista de la situación de crisis que vivimos en este momento, molesta, incómoda. De alguna manera uno recrea esa realidad y juega con los elementos de esta realidad, pero sin ese traslado directo. Desde luego, frente a esa concepción de que "la vida está en otra parte", tan común, de ubicar las novelas en París o ahora en Shangai porque está de moda China, o en Londres o en Nueva York, tan típico de nuestros mismos novelistas, yo pienso que la vida está aquí. Y es tan rica y tan interesante y tan triste y tan maravillosa o tan dura como en cualquier lugar. Y por eso lo ubico en Mérida, que es mi medio natural, mi ciudad. Pero librando un poco al lector de lo duro y lo triste de una realidad cotidiana tan pedestre.

FC:
Yo tuve un
a impresión leyendo el libro, y es que, a pesar de que el eje que conecta todas las historias sería la Policía Judicial, que es donde se resuelven los casos, es adonde llegan los casos, independientemente de que se resuelvan o no, la gran protagonista siempre es la violencia, y cómo va experimentando distintas facetas, distintas caras, distintos comportamientos, cómo se va transformando y yendo desde lo que sería la mezquindad, la violencia irracional, la venganza, cómo va transformándose, hasta el asesinato por sicariato. ¿Usted se había propuesto lograr eso, mostrar la violencia desde distintas perspectivas para crear toda una masa que se erige como la gran protagonista en el libro?

PRM:
Sí. En primer lugar la violencia está pero no en sí misma, no en el regodeo de la sangre, de
la muerte, tan normal en la novela policial típica...

FC:
Se aborda como de manera oblicua, ¿no?

PRM:
Sí, señalada como un instrumento del conocimiento de los hechos, o una muestra de la condición humana de los personajes. Pero no en el regodeo absoluto de la misma violencia. Y, evidentemente, una de las cosas que yo me planteé al escribir la novela fue buscar mostrar las formas de violencia en función de las clases sociales. Entonces está la violencia de los malandros, la violencia de un cineasta de clase alta, la violencia de un profesor universitario, es decir, la violencia representada en función de quien la ejecuta. Cómo se ejerce esa violencia. Una forma de representar la realidad nuestra.
[Vamos a corte]

FC: ¿Qué le parece si ahora revisamos el libro cuento por cuento? ¿Cuáles fueron la ideas que inspiraron las historias que aparecen aquí, en Muerte en la víspera, y que terminan armándose como una novela, como un todo? Y empezaríamos por el primero: "Una verdad verdadera". ¿Cómo surgió, qué lo llevó a la escritura de este cuento? Cuento que, además, se subdivide en cuatro partes que vendrían a ser los elementos básicos de la de construcción del relato policial: "Un crimen", "Un investigador", "Una pesquisa", y "Un desenlace".

PRM:
Bueno, el crimen principal que origina la novela es el asesinato de un poeta, como elemento esencial para desarrollo del resto de la novela, pues comienza mostrando cómo fue ese asesinato y de, de alguna manera, narrando la vida de los personajes, el persona
je que va a investigar, su situación, por qué está ahí, por qué le toca a él investigar, relacionado un poco con la vida de la ciudad también, con la vida de Mérida. Ese es como el primer elemento, ¿no?, de dónde partir. ¿Qué va a buscar el lector? Va a buscar, en primer lugar, quién asesinó al poeta. Es como la primera pregunta que se presenta, porque en la novela hay varios asesinatos y entonces este es el primer enigma...

FC:
Con el que abre, además, la novela.

PRM:
Sí.

PV: Un asesinato que estará marcado y que se verá marcado a lo largo de la novela. Pero, luego de "Una verdad verdadera", podríamos pasar a "El mundo al revés", la segunda historia que conforma el todo de la novela, a la cual en primer término uno no le vería la conexión con el relato anterior, "Una verdad verdadera", porque va más hacia mostrar el mundo en el cual se está viviendo. Esa realidad de la que, como decíamos en el segmento anterior, no puede escapar nadie, de la cual no puede escapar ninguna persona.

FC:
Sí, y que además es una historia que concibe como única lógica posible la ilogicidad de la institución policial, de las leyes, del país. Entonces es un relato que se funda en una especie de lógica del trastocamiento: vivimos en un país al revés.

PRM:
[Risas] Bueno, fíjate, es la historia de un cineasta que hace un reality show, es decir, crea una situación de violencia ficticia, contrata unos malandros para que hagan un secuestro, y así f
ilmar todo esto que sucede con la idea de ganar el Oscar, de ganar los premios y hacerse famoso. Desde luego, una situación de este tipo es siempre incontrolable, la violencia crea un laberinto que nunca se sabe donde termina. Y termina con el asesinato de la secuestrada que es precisamente la esposa del cineasta, una actriz.

FC:
Y además, esta filmación es una especie de reality show, donde el mismo cineasta es el que produce todas las situaciones que ocurren con la finalidad de filmarlo y llevarlo a la pantalla, es decir, el grado máximo del morbo por la violencia.

PV: No sólo el morbo por la violencia sino que también podríamos ver ahí el grado máximo de lo que podría ser el arte por el arte.

FC: Peligrosa concepción... [risas] Bueno, la siguiente historia, "El prestigio", una historia deliciosa, una historia que además enlaza lo histórico, la guerra de independencia, con la trama detectivesca, con las creencias espirituales, esotéricas y que además rompe totalmente con la racionalidad. En este caso el crimen se resuelve apelando al espiritismo, a lo metafísico.

PV:
Y a lo mítico en cuanto a la leyenda del tesoro de Pelayo.

PRM:
Sí. Yo quería mostrar algo que es muy importante en nuestra realidad: lo supersticioso, lo metafísico. El mundo de todos los venezolanos está siempre tocado por algún lado por el espiritismo, por los santos, por todas esas formas esotéricas, para ponerle un nombre. Entonces, contando la vida del investigador que se encarga de investigar la muerte d
el poeta, se muestra de donde viene su prestigio, por qué se hizo famoso él. Y de donde viene es de una investigación en los campos petroleros en Oriente, la zona del sur de Anzoátegui y Monagas, que tiene que ver con sucesos históricos que ocurrieron en la independencia, el tema de los tesoros, de los muertos que cuidan los tesoros, y que al final le sirve a él como elemento para descubrir quién es el asesino en esa trama.

FC: Y otra cosa importante de esta historia es que aquí es donde se erige el que vendría a ser el personaje heroico de toda la novela, el personaje que realmente está apegado a la institución, que está apegado a la ley, que está apegado a las normas, y que tiene realmente la intención de resolver los casos, de resolverlos y llevarlos a feliz término, de que triunfe la justicia.

PRM:
Sí, en Venezuela es el iconoclasta, el que está en contra de lo establecido.
[Risas]

PV:
Pero además podemos ver en este personaje algo que a mí me llamó mucho la atención, que él resuelve todos los crímenes, que él va a favor de la justicia, pero no se puede obviar el hecho de que es ayudado por un socio. Me llamó mucho la atención la figura del socio. Tenemos el socio más famoso de nuestra literatura venezolana, el socio de Doña Bárbara, y el cuartico donde ella se metía y hablaba con su socio, pero me imagino que lo del socio viene por eso que usted nos venía explicando de las creencias venezolanas.

PRM:
Sí, bueno, el detective juega con eso. Juega con que habla con alguien porque todo el mundo piensa que él resuelve sus casos con la ayuda de un espíritu, entonces él, burlándose un poco de sus compañeros de trabajo, hace que habla con el otro, con el socio, pero realmente es un juego. Él es cartesiano en el fondo, pero se divierte con eso,
burlándose de los otros, de sus creencias en los espíritus.

FC:
Sí, ahora vendría la cuarta historia, "Bioquímica de los sucesos", que es la que a mí me dejó más perplejo porque es una historia que apela a una película que está muy en boga, ¿Qué diablos sabemos? Cuéntenos un poco sobre esta historia.

PRM:
El detective Altuve está haciendo una pesquisa sobre un asesinato ocurrido en una discoteca de Mérida, el típico asesinato de un muchacho desarmado que es asesinado por otro que se escapa del país. Algo tan común en nuestra ciudad y en Venezuela. Buscando el paradero del supuesto asesino, Altuve entra a un cine y donde pasan una película que tiene que ver con la física cuántica. Entonces él queda impresionado, no tiene idea de lo que es aquello y comienza a ver el mundo a través de la física cuántica, a comprar libros. Y compra la película, y se pone a verla, y saca notas, y copia aquello y luego lo usa para levantarse a la detective, como una forma de seducir a la detective, que él cree que sabe algo del asesinato del Perico, el detective que fue asesinado, y entonces comienza a interrogarla sutilmente entre el juego de levantarla y de averiguar sobre la muerte del Perico.

FC:
Que es el que muere al principio.

PV:
Entra ahí otro de los estereotipos de los personajes de nuestras novelas y de casi toda nuestra narrativa latinoamericana, que es lo punzante, ese juego de lo pasional del latinoamericano. Tenemos a un detective Altuve que siempre está como echándole los perros, como diría uno, a la detective Andueza.

PRM:
Sí, bueno, es la costumbre nacional. [Risas]

FC:
Bueno, la siguiente historia sería la que le da título al libro, "Muerte en la víspera", que es una historia que me llamó la atención porque siento que hay allí una violencia que pierde sentido. Estamos ante una violencia "porque sí". La venganza y la mezquindad quizá son la única explicación posible y la justicia llega de la forma más cruel a cumplir su papel. Y, entonces, el supuesto orden se restituye de una forma inesperada, lateralmente. No parece estar accionado directamente por el que nos viene contando la historia que es un detective de acá de Mérida a quien el consulado español le encomienda que haga la investigación del caso, que le haga todo el seguimiento para llegar al fondo. Cuéntenos un poco más sobre esta historia.

PRM:
Claro. La historia es la muerte de una niña en el Orinoco, que va en una chalana en un viaje y la chalana se hunde y alguien que viaja con ellos, con la familia y con la niña, le roba el salvavidas a la niña para salvarse, y la niña muere. Entonces empieza la persecución, por parte de la familia, de este señor que es un árbitro de fútbol que iba a pitar un partido entre dos comunidades en el Amazonas, los Yanomani y no recuerdo qué otra comunidad. Entonces es la persecución de este señor primero en Táchira, porque es un árbitro del Táchira, y luego en España porque este señor es tratante de blancas y se lleva unas prostitutas a España. Viaja a España y en España comienza a ser perseguido y mutilado. Primero le cortan una mano, luego le cortan la lengua, y así sucesivamente. Entonces la policía quiere saber cuál es el origen de ese crimen, por qué persiguen a este señor, y el Consulado de España en Mérida contrata a un investigador para que vea qué fue lo que pasó, quiénes están haciéndole esto a este señor. Luego la trama pasa a España, a Madrid, a Barcelona, y cuenta un poco el tema de la vida de este tratante de blancas, y, por otro lado, la historia de la familia que persigue por la muerte de la niña a este señor, y se muestra en parte el mundo de la clase alta, el mundo de la ópera, el mundo de cómo se monta una ópera en Mérida, los inconvenientes y todo, jugando un poco con el humor.

FC:
Y hay una tensión erótica ahí latente que vas dejando poco a poco que se vaya armando hasta un final vampiresco...

PRM:
[Risas]
Sí, la historia de un abogado, un juego de tensión sexual entre el abogado y la hermana de la niña muerta en el Orinoco. Ya sería ésta la forma de asesinato más sutil, el asesinato dirigido a través de otros, contrastando con el asesinato de las primeras páginas, que es el asesinato de los sicarios, el secuestro, la violencia directa.

FC:
Que se maneja más intelectualmente.

PRM:
Sí, a través siempre de otros, a través de testaferros, de sicarios, sin ensuciarse la manos.

FC:
Una faceta más de la violencia.

PRM:
Claro.
[Vamos a corte]


Comentarios finales:
PRM:
El momento en que vivimos ahora después del fin de la Modernidad, del fin de la esperanza de que pronto, con la educación de las masas y el desarrollo de las ciencias y la tecnología, se solucionarían muchos de los problemas de la sociedad, ahora pasamos al escepticismo, a cuestionar la posición de los absolutos. Del determinismo de antes ahora pasamos a la duda. Yo digo "dudo, luego existo". [Risas] Borges ya decía: "la filosofía es un sistema de dudas".

Gracias, Pedro.

Los expulsados